¿Cómo limpiar una freidora sin aceite?

como limpiar una freidora sin aceite

Saber como limpiar una freidora sin aceite es esencial, aunque pueden cambiar algunos aspectos en función al uso que le des. Lo más sencillo es que, después de utilizarla, le des una limpieza rápida, que puedes repetir nuevamente antes de volver a ponerla a funcionar. Para que no tengas muchas dificultades, te detallamos el paso a paso de este proceso.

Aprende a limpiar tu freidora sin aceite

Como has podido percibir, una freidora de este tipo no tiene nada que ver con una convencional. Por este motivo, requiere de una limpieza muy diferente.

En algunos modelos, el fabricante te indica la posibilidad de introducir algunas piezas en el lavavajillas, como la cesta. También podrás lavar las piezas de la manera tradicional, con la ayuda de un cepillo para las zonas más complicadas.

Ahora vamos con la parte más importante. Lo primero es desenchufar la freidora de la corriente y apoyarla sobre una superficie segura.

Cuando hayas quitado todos los accesorios, pasa un paño seco o papel de cocina absorbente para eliminar cualquier resto de comida que haya podido quedar. Da la vuelta a la freidora, para evitar la resistencia, y repite el proceso.

Si la suciedad está muy pegada, elige un cepillo o esponja que te ayude a removerla. Recuerda realizar esta limpieza en seco, ya que de lo contrario podrías afectar al aparato.

Es posible que, después de los pasos anteriores, no consigas acabar con determinados restos de suciedad. Así que, en un frasco con difusor, mezcla tres gramos de bicarbonato con 100 mililitros de agua. Aplica muy poco de este producto sobre las manchas más complicadas y espera cinco minutos, con el fin de que consigas ablandarlas.

Después, con un paño ligeramente húmedo te será más sencillo retirar la suciedad. Puedes usar un cepillo para un mejor resultado.

¿Cómo eliminar los olores? de una freidora sin aceite

No siempre es sencillo eliminar los olores de una freidora sin aceite, aun después de la limpieza que te indicamos antes.

Un método casero consiste en exprimir medio limón y empapar un paño, con el que darás una pasada a los elementos de la freidora, incluida la canasta. Deja reposar la freidora media hora y vuelve a pasar el paño, esta vez humedecido ligeramente con agua.

No te olvides de dejar que se sequen muy bien todos los componentes de la freidora antes de utilizarla.

Cuidados en la Limpieza externa

La limpieza externa de la freidora debe ser también muy cuidada. Evita los productos corrosivos, como los antigrasas o aquellos que llevan lejía. Usa un paño poco húmedo con una pizca del jabón que empleas para limpiar la vajilla. Después, deja que el aparato se seque. Ahora que ya sabes cómo limpiar una freidora sin aceite, que requiere un trato especial y prácticamente en seco, no tienes de qué preocuparte.